Este es un asunto que mucha gente me ha preguntado a lo largo de mi vida. Cuando tengas un hijo...¿le hablarás inglés todo el rato? Al principio no lo tenía claro, pues veía todo beneficios en esta opción. Sin embargo, con el paso de los años, por experiencias y por leer sobre el tema, mi respuesta es rotunda: NO. Y cada vez que digo NO, siempre viene lo siguiente: "¿Cómo que no? Si sabes hablarlo y le hablas desde pequeñito, conseguirás que tu hijo sea bilingüe. Ojalá yo pudiera hacer eso. Si no lo haces, estás desperdiciando una buenísima oportunidad."
En primer lugar, pienso que hay una excesiva obsesión de los padres hoy en día por que sus hijos aprendan inglés. Está claro que es necesario y debe de ser prioritario para todos, pero no es lo único importante en el niño. Nuestras generaciones no tuvimos casi oportunidades ni herramientas para aprenderlo bien pero hoy en día hay un grandísimo abanico de posibilidades para que los niños lo usen y lo aprendan correctamente. Por lo tanto, no es una cosa que nos deba obsesionar, porque todo eso se transmite muy fácilmente a la criatura.
En segundo lugar, tener un hijo es una experiencia maravillosa en la que creas un ser que está ligado a ti de por vida. Es decir, se establece un vínculo materno-filial muy fuerte. Esta comunicación entre madre/padre e hijo debe ser lo más natural y cómoda posible. Por ello, los padres deben de usar la lengua que más dominen y en la que más cómoda estén EN TODAS LAS SITUACIONES. Un padre puede ser experto en inglés, por ejemplo, saber expresarse perfectamente, pronunciar como un nativo, conversar tranquilamente, entenderlo todo...ser muy competente en la lengua extranjera pero AÚN ASÍ, sentirse más cómodo en su lengua materna, pues en esa es la que se ha criado y en la que se siente "como en casa". Entonces ¿por qué crear una atmósfera artificial para su hijo?
Creo que la lengua materna nos proporciona miles de cosas necesarias para comunicarnos con nuestro hijo que la lengua extranjera no lo hace. Vocabulario específico de bebés, cantos, nanas, cuentos infantiles, tradiciones familiares, la manera en dirigirnos al bebé, resolución de problemas...etc. Por supuesto podemos cantarle una nana o contar un cuento en inglés a nuestro hijo pero.. ¿estamos capacitados y dispuestos a hacerlo las 24 horas del día? En la teoría suena muy bonito "soy profe de inglés, le hablo a mi hijo en inglés" pero supone una dedicación de tiempo y esfuerzo inmensurable. La situación es ideal pero hay que pensar en situaciones cotidianas y reales del día a día donde tu hijo se relaciona con otros niños, donde tienes que ayudarle cuando tiene un problema con los amiguitos, dirigirte a él de diversas formas al enfadarnos, al abrazarle, al ayudarle...etc. Hay que ser capaz de hablar de todos los temas posibles que podemos encontrarnos al criar un niño. De niño hablaremos con él de clase, de los amiguitos, de colores, de animales...pero poco a poco tendremos que ir hablando de cosas más serias pasando por la adolescencia y la época adulta. Además, si el inglés es nuestra segunda lengua, puede haber matices que se nos escapen, aspectos socio-culturales que no sepamos, vocabulario que usemos mal, algo que pronunciemos erróneamente...etc. Y la relación con nuestro hijo tiene que ser lo más natural y cercana posible, no podemos estar sintiéndonos como si pasáramos un examen diario. Podemos correr el riesgo también de que, debido a que el niño se relacione en castellano con todos menos con su madre en este caso, se encuentre más cómodo en esa lengua y esté más cómodo comunicándose con todos los que le rodean y poco a poco la comunicación materno-filial o el vínculo sea menor. Recordemos que el inglés es una lengua que estudiamos, pero que no está presente en nuestra cultura ni en nuestra sociedad como puede ser una lengua cooficial de la Comunidad.
Es super importante también saber que necesitas el apoyo de tu pareja si decides esta opción. El esfuerzo diario de hablar 100% en una lengua extranjera debe ser apoyado por las personas que comparten el entorno del niño. No podemos luchar solos en esta batalla. Tiene que ser una decisión muy meditada y tomada por ambas partes y saber que los abuelitos, los primos, los amigos lo respetan y nos ayudan.
Que no se le hable inglés 100% las 24 horas del día al niño ¿quiere decir que no le damos importancia al idioma o que no queremos que aprenda? Por supuesto que no. Hay muchos momentos en los que los padres pueden y deben usar la lengua extranjera para comunicarse con los hijos como bien puede ser leyendo, viendo dibujos o películas, haciendo alguna actividad, llevando al niño a alguna escuela de idiomas, academia, colegio, viajando, algunos ratos específicos al día..etc incluso ir aumentando esa presencia de la lengua cada día más. Podemos hablarlo un poquito cada día también. Hoy tenemos muchas posiblidades y hay que aprovecharlas. Pero no confundamos querer que nuestro hijo aprenda inglés con "quiero crear una persona bilingüe en mi casa para que aprenda inglés desde el principio."
Sobre esto hay muchas teorías y opiniones. Mi opinión se basa en experiencias reales de niños educados en lenguas extranjeras y en materiales que he leído al respecto sobre todas las opciones posibles. Todo es respetable mientras cada uno crea y haga lo que considere oportuno. Yo me quedo con los beneficios de la lengua materna porque me liga a mi madre y a mi abuela y así quiero ligar a mis hijos. Y os lo dice alguien que sin el inglés no puede vivir :)
¿Qué opináis? ¿Qué haríais en esta situación?